Nos equipamos con lo básico para un día de caminata, cargamos los equipos de pesca, que en este caso fueron cañas livianas #4 (aunque hubiera sido mejor un #3) con líneas de flote y variedad de moscas como ser ninfas, secas y algunas imitaciones de terrestres y nos pusimos en marcha lo más rápido posible ya que nos invadía la impaciencia por la primer salida del 2012.
Rápidamente nos dimos cuenta que la geografía del lugar distaba mucho de lo que imaginábamos y que el recorrido hasta el rio sería mucho más difícil de lo pensado. Luego de ubicar el arroyo el cual bordearíamos para llegar el rio fuimos descendiendo y vislumbramos unos pozones muy prometedores que desde una altura considerable ya dejaban ver como las truchas tomaban en la superficie enérgicamente. Decidimos armar las cañas y comenzar a pescar sobre el arroyo con moscas secas debido a la gran actividad, los piques fueron instantáneos y voraces, y sin haber pasado más que unos pocos minutos cada uno ya había podido concretar varias capturas de truchas que promediaban los 15 cm.
Sin exagerar en cada pozón se podían observar más de 15 truchas muy mansas y que nuestra presencia parecía no incomodarlas. Esto se repitió en todos los pozones que pescamos hasta llegar a un curvon por el cual decidimos dejar este arroyo y subir otro cerro para poder llegar al Tabaquillo (1600msnm) que era nuestro objetivo del día y donde esperábamos que los portes se incrementaran.
Al llegar a la cima del cerro pudimos ver el rio al fondo del cañadón y mire a José (fiel compañero de pesca) a la cara como diciendo '' hasta allá abajo hay que ir!!'', pero bueno el amor por la pesca podía más que renuencia a caminar. La bajada fue larga y difícil, nos llevo una larga hora y desgasto nuestras piernas, por lo que nos arrimamos al agua recién a las 13hs a un hermoso pozón que teníamos visto desde bien arriba y nos daba la promesa de poder sacar algún submarino, tanto así que ilusión pudo más que el hambre y sin perder un segundo nuestras moscas ya estaba en el agua. Como no se veía movimiento atamos ninfas en nuestro tippet ( en mi caso una prince en anzuelo #14) y lance sobre la cabeza del pozo en medio de la espuma y pude ver como una linda trucha se acercaba pero a último momento pegaba la vuelta, esto se repitió un par de veces hasta que finalmente tomo la mosca y pude sacar esa hermosa trucha de unos 25 cm y una excelente sanidad. Luego de esto procedí a atar una ninfa de dammsel con ojos de cadena para poder profundizar el pozón y con un lanzamiento largo la hice correr varias veces sin respuesta, hasta que en una de las pasadas la mosca se ubico bajo de una saliente de una gran piedra que emergía del agua y fue ahí que la mayor captura del día se dio, un hermosos ejemplar que calculamos rondaba los 700 grs.
Luego de comer algo para recuperar energía empezamos a pescar rio arriba concretando varias capturas de unos 25cm, todas muy bien alimentadas y enérgicas que nos brindaron un momento muy entretenido. Subimos el rio hasta que se encajono y nos corto el paso con los cual nos quedamos probando suerte en el ultimo pozo al que teníamos acceso. Ya con las cuentas personales que acusaban más de 40 capturas por caña y con la hora que nos apuraba a emprender el regreso que ya veíamos iba a ser muy cansador, volvimos por nuestros pasos hasta encontrar un pequeño afluente por el cual decidimos comenzar el ascenso que debimos fraccionar en etapas ya que las piernas y el aliento no duraban mas de unos 30 metros en vertical y debíamos tomarnos unos segundos para recomponernos. Luego de una hora de ascenso y de consultar un par de veces el GPS, que fue de gran ayuda para poder elegir el camino que nos llevara de vuelta al sendero que nos dirigiría hasta el puesto, decidimos poner rumbo hacia una casa que habíamos visto que se encontraba cerca desde imágenes satelitales en la cual pudimos pedir indicaciones y así por una senda de caballos que desaparecía a cada rato y nos dejaba con la duda de por donde seguir pudimos llegar al sendero principal que el GPS marcaba como camino 4x4 pero que a lo sumo podría hacerse en moto con una gran dificultad.
Se dio la casualidad que el fin de semana elegido coincidía con las fiestas patronales de la zona por lo que el camino estaba bien marcado por la gran cantidad de personas que lo habían recorrido ese día. Esto nos dio la seguridad de que por lo menos tendríamos un camino seguro hasta el vehículo por más que se pusiera el sol. Tras recorrer el sinuoso camino que cada vez constaba mas debido al cansancio y pudiendo disfrutar de la inmensidad del paisaje llegamos al puesto a eso de las 19 hs tras 4 hs de caminata ininterrumpida que aunque creyendo que no seriamos capaz de realizar, finalizamos airosos recorriendo mas de 10km en total.
Esta aventura nos dejo como conclusión que debido al difícil acceso a este tramo de rio y al cuidado del grupo de pescadores con mosca de Rio Tercero los ríos se encuentran con una gran población de truchas. En los arroyos más chicos donde vimos la mayor cantidad de peces se pudo apreciar que esa gran población empezaba a dar muestras de falta de comida. creemos que esto también es la causa de los portes acotados que se encontraron.
Fuera de esto fue un gran día que aunque no dio los grandes ejemplares que esperábamos si nos brindo cantidad y que sin duda a pesar de lo complicado que es acceder al rio, es un ambiente ideal como escuela de aquellos que se inician en la actividad y todavía no tiene las armas para enfrentar ambiente con más presión de pesca. Un pescador que se esté iniciando podrá aprender mucho de este lugar y realizar varias capturas que lo motivaran a seguir aprendiendo de esta hermosa actividad.
Se utilizo una caña Redington CT #4 y una Surfish Icaro #3/4 con líneas Rio GOLD y tippets 5X y 6X. En cuanto a las moscas utilizadas no podemos decir que alguna se destaco, ya que todo lo pusimos en el agua fue tomado, pero lo más utilizado fueron unas ELk Caddis, Prince, Cooper John, Caddis Pupa y algunas imitaciones de tucuras o un algún pequeño streamer para los pozos profundos.
Recomendamos llevar agua suficiente ( en nuestro caso complementamos tomando agua del rio, aunque no es recomendable ya que podemos enfermar estando muy lejos del vehículo) como así también abrigo en caso de que nos agarre la tarde con la puesta de sol, un GPS nunca está de más y los víveres necesarios para reponer la energía consumida.
Espero que este relato haya sido placentero de leer como lo fue para nosotros esta aventura y sin más que agregar me despido hasta la próxima oportunidad saludando a todos los que comparten nuestro amor por la pesca con mosca.
Daniel Fernandez Bernis
