La pesca con mosca en pequeños cursos de agua requiere de una disciplina muy diferente a la habitual en grandes ríos, que dejará a muchos pescadores cabizbajos, maldiciendo por el esfuerzo. La pesca en estos sitios implica arrojar la mosca hacia la esquiva trucha en aguas cristalinas y en espacios muy incómodos. Quienes practican este tipo de pesca usualmente sufren de rayones en los brazos, rodillas lastimadas y egos apaleados. He aquí algunas recomendaciones que he hallado muy eficaces al pescar en dichas circunstancias:

Las pisadas asustan a los peces. Muévase lentamente y camine suavemente.
Busque refugio detrás de la maleza o árboles.
Evite que su sombra se proyecte sobre el agua.
Mantenga su caña paralela al suelo, con la punta detrás de usted.
Exhiba su caña solamente cuando esté dispuesto a lanzar. Mantenga la sombra de la caña fuera del agua.
Utilice la combinación de leader y tipet más larga y liviana posible.
Una presentación delicada y una deriva sin arrastre son fundamentales.
Utilice técnicas no tradicionales de lanzamiento -roll, lateral - para presentar su mosca.
Y sobre todo, tómese su tiempo.
Doc Thompson