Fd: ¿Cuándo empezaste a pescar con cañas de dos manos?
RA: Empecé a pescar y a guiar con dos manos en el año 2001, en Santa Cruz. Ahí agarré mi caña por primera vez. Arranqué con Spey. Después, cuando volvía a pescar a Bariloche, pescaba con una mano y más tarde me encontré con que el Limay era un río para dos manos y empecé a pescarlo así también. Era el famoso pescador con caña “de pejerrey”, como me decían.
Fd: ¿Nadie más pescaba de esa manera?
RA: Nadie. Sólo pescaban así los chicos que guiaban en Río Grande, guías que hacían temporada allá. Pescadores de Spey que venían a fin de temporada, al cierre en el Limay y le metían con ese estilo.
Fd: ¿Cómo aprendiste a pescar con Spey?
RA: Aprendí mientras hacía el scouting en Santa Cruz con un guía de Alaska y otro de Canadá. Ellos me enseñaron a pescar con Spey. Después, por guiar mucha gente que dominaba el estilo; guiaba a muchos ingleses, escoceses y rusos, y todos venían con su caña de Spey.
El Santa Cruz es un río para caña de una mano tranquilamente, mucha gente lo pesca de esa manera. El Spey te ayuda a cubrir todas las aguas y de vadeo. Es más simple castear, cubrir distancias y traer al pez más rápido y de manera más manejable.
Fd: ¿La línea más pesada ayuda a la hora de castear?
RA: Esto depende del agua. Si vas a pescar con deriva necesitás algo que no hunda tanto, entonces uno puede “mendear” y darle tiempo; reposicionar la mosca, moverla un poco.
Fd: ¿Las truchas toman la mosca en el momento del swing, en el cierre?
RA: En el Santa Cruz depende del agua, depende mucho del agua. Cuando es agua de steelhead, aguas semi-lentas, con corriente pero lentas, ahí sí toman. Quizás en aguas un poco más rápidas toman ni bien entra la mosca al agua, pero yo creo que el swing es muy importante dentro de un cast.Si no hay swing, si es sólo castear y traer, no tiene sentido. Creo que se disfruta más con swing, para mí lo es todo, y dentro del Spey también, se trata de hacer nadar la mosca. Muy poca gente pesca al swing. No hay cultura en Argentina de pesca de swing, muy poca.
Fd: Los pescadores “de antes” hacen nadar la mosca. ¿Es así?
RA: Tiran distinto. El que es de Córdoba es muy de tirar 90º, y el pescador de antes siempre tiraba la mosca 45º y dejaba derivar. Me pasa mucho con clientes a los que les digo “Mendeá, corregí la línea.” Y me miran sorprendidos.Dentro del swing, el mend es importantísimo, creo que es todo. Una buena presentación, un buen mend, otro buen mend, y ahí es donde se acomoda el leader o la mosca y empieza el swing.
Fd: ¿Y nunca mendeás o corregís para abajo?
RA: Eso en corredera. El tiro depende del agua donde pesques. Uno puede variar el tiro. Es muy importante también cambiar la línea en el momento en que estás pescando. A mí, básicamente no me gusta pescar pesado. Yo necesito que me cubra todo el recorrido. Si el tiro cierra sin tocar el fondo, divino.
Fd: ¿Siempre en Santa Cruz o en Bariloche también?
RA: En Bariloche también. Yo estaba pescando con un hundimiento número 5, y ya siento que es mucho. Ahora estoy usando líneas de hundimiento 4 e incluso intermedias.
Fd: Hablando sobre la boca del Limay, ¿cómo la pescás?
RA: Depende de cómo esté el agua. Lo que tiene la boca del Limay es que tiene un escalón, que cuando acelera, el agua sube. No es que corre por una canaleta, sino que cuando empieza a acelerar el agua sube el fondo, entonces es ideal para una ninfa. Ideal porque cuando subió, ¡pumba!, ahí la toma.En la boca también el swing es importantísimo, yo he tenido mucho pescado de swing.
Si tenés una buena presentación y la mosca entra derecho, no hace falta “strippear”. También influye la mosca; es todo el conjunto: el agua que pesco, la línea que llevo, la mosca, el leader y el tiro que hago. Todo cambia en el momento y en la situación en la que cada uno llega al lugar.
Con lo baja que esta hoy la boca (fin de temporada 2012-2013) no la pescaría con un shooting de hundimiento ni loco, me iría a un intermedio y leader largo. Porque en el momento en que bajó ya se la estás presentando en la cara. Habría que probar, cada día es distinto, yo hace mucho tiempo que no la pesco. Pero la veo y calculo. Siempre en la punta del run de la boca, las chicas se paran adelante y las grandes se paran en la corriente. Siempre. No me preguntes por qué. Abajo, en el borde del chupón, donde corre rápido, ahí están las grandes y las chiquitas están más adentro.
Si haces un tiro bien hacia el lago y empezás a mover la mosca, sacás las chicas pero son amagues lógicos, la grande está esperando. Lo que pasa es que por el tapón del lago pasa todo, ésa es la razón.
Fd: ¿Las truchas están comiendo cuando están ahí? ¿Están engordando?
RA: Cuando el pescado está activo en la boca, está comiendo, 100%. Hay pescados que viven todo el año ahí, en ese lugar.
Fd: ¿Y las otras bahías del lado norte del lago?
RA: Nada, vacías. Siempre uno dice “Si están acá, ¿por qué no alrededor?” Están más del lado de Río Negro, porque más adelante está el Nirihuau, que es otra desembocadura; calculo que pasan por ahí. Se mueven más de esa costa que de la otra. Será que antes de entrar al río van comiendo, como cargando energía antes de entrar.
Fd: A esa boca también le pega el viento. Tienen comida, buena oxigenación y demás seguramente.
RA: Sí, yo la he pescado pero nunca con éxito. He dejado muchas moscas porque hay mucha piedra, todo lo que trae el lago, mucho palo. La he pescado y es lógico que haya pescados, las ves moverse pero están adentro, muy adentro. La trucha va, se acerca, come y cuando levanta el sol las marrones se van. Están ahí, un poquito más adentro pero no están activas. He buceado muchas veces, y sé que están ahí.
Fd: Pescando en la boca, cómo influyen los momentos del día?
RA: La trucha está todo el día ahí, lo que pasa es que tiene sus momentos de activación. Yo he metido pescado a cualquier hora. Hay que romper un poco el mito de que la boca del Limay se pesca a última hora o muy temprano de noche, no existe eso. Depende de la luna, la presión atmosférica y seguro de muchas cosas más. Y eso cuando nadie las haya castigado. El pescado no es tonto. Un “lineazo” mal puesto, y se fue. Hay que pensar en cuántos mosqueros hacen eso por día.
Ahora estamos en una época donde el pescado está entrando todo el tiempo al río. Tienen que pasar por la boca y una parada técnica hacen. Vienen del lago, anda a saber cuántos meses están en el lago dando vueltas. Necesitan la adaptación de oxígeno, respirar oxígeno corriente y esa mínima adaptación la hacen allí. Ahora, donde le metieron 25 líneas, las perdiste. Pero siempre fue un lugar de parada. Después hay muchos guías que dicen que entran como un pescado fresco y que toman recién al día siguiente. Entran a alimentarse. Que vos no las agarres al día, no quiere decir que vayan a tomar al día siguiente. Yo escucho eso mucho en la boca.
Fd: Se dice que en la boca, cuando la ola te pasa por encima, hay que estar adentro pescando sí o sí.
RA: Es así. Acá siempre pesqué con “rosca” y cuando hay más “rosca” mejor. Yo siempre pesqué esos días.
Fd: ¿También pasan muchas truchas de noche?
RA: La mayoría de los runs se mueve de noche. Hay mucho más movimiento de pescado de noche que durante el día. Pero si sos buen pescador no necesitas entrar de noche. Si te consideras referente o consideras que sabes pescar, no necesitas entrar de noche. No tiene sentido. Siempre escuchamos que las grandes comen de noche o a última hora, cuando en realidad comen durante todo el día. Esto se ve en nuestras filmaciones. Para que pique en esas condiciones hay que irritarlas, presentarles bien la mosca, y ahí sí salen.
Una cosa que hay que hacer para el Limay es extender la temporada, porque perdemos el run de la arco-iris, que hoy no existe. Tenemos una de las mejores arco-iris de agua dulce en el Nahuel Huapi que la mayoría desova en el Limay y no las vemos porque tenemos la temporada cerrada. No las vemos, una pena.
Fd: ¿Correr la temporada un mes sería suficiente?
RA: Sí, sobra con ese tiempo. Si, de hecho, nosotros ya empezamos a meter muchas arco iris al cierre de temporada. Meter marrón y arcoíris en el mismo momento, eso es muy importante en el río, que tenga dos especies grandes de pescados migratorios; pero bueno, no lo podemos ver porque es una cuestión de reglamento.
Hay que sentarse con las asociaciones y empezar a trabajar en arrancar la temporada un mes más tarde. En noviembre los peces están cansados, en malas condiciones.
Fd: ¿En el lago, cuál pensás que es el mes para pescar las marrones? ¿Durante la apertura?
RA: A mediados de diciembre es muy bueno. Y ya al cierre, porque después empieza a levantar la temperatura y los peces se van a 40-50 metros. Entonces va a estar comiendo larvas de puyen, migrando y se va muy abajo, lo que es raro para una marrón. ¿Qué hace un pez a 40-50 metros? No hay nada ahí, hay oscuridad plena.
Fd: Las ecosondas muchas veces las marcan a 30 metros de profundidad. ¿Es así?
RA: Sí, y más abajo también, en el lago hasta 60-70 metros. Según biólogos, hay vida a esa profundidad y samastacus grandes pero yo creo que siguen la larva del puyen. Si no hubiese larva de puyen no habría salmónidos.
Dentro del proceso es muy importante el puyen. El mismo desova, de estadios cortos del huevo sale una larva, y la larva migra. Tiene un 98% de efectividad de reproducción. Vive 1 año, no más que eso. Se alimentan del micro plancton. Por eso si el micro plancton sube, la larva sube. Si baja, baja.Migran de la costa al medio del lago y se mueven en masas de millones de millones. Bajan hasta los 40 metros, y las marrones bajan. Sube el micro plancton durante la noche, y ellas también suben. Por eso el pescado come más de noche que de día, porque tiene el alimento más accesible, a mayor altura, abren la boca y comen fácil. La larva empieza a cambiar el estado a alevino y cuando ya produce sus aletas, va hacia la costa. Se alimenta, desova y muere.
Fd: ¿Qué tamaño tienen?
RA: El de un alevino, son un poco verdosos como el pejerrey.
Fd: ¿Y hay mucha cantidad?
RA: Hay mucho, son organismos autóctonos.
Fd: ¿Y el alimento de mayor tamaño?
RA: También. Hay pejerreyes, todavía hay, hay percas también. A mediados de noviembre hay runs migratorios de percas en el Limay que vienen a desovar. Están en Alicura, lo que es el tercer brazo del Limay. En noviembre podes pescar muchísimas percas. Se hicieron migratorias. Yo he visto runs de percas en el segundo tramo del Limay, el fondo estaba tapizado y había monstruos. En Dique Ameghino también es increíble.
Fd: Nos comentaron que algunas de las truchas más grandes están ahí. También que acá en el Nahuel Huapi hay truchas gigantescas que no migran.
RA: Están mucho más abajo que a los 60 metros. Cada tanto sale una. Proliferaron pero muy poco.En el lago salieron truchas muy grandes, como una de 8,500 kg. hace 10 años. Un amigo, en el Millaqueo, sacó a las dos de la tarde la más grande que vi, una marrón inmensa. Una cosa ilógica y con el lago planchado. Yo he sacado una de 9,400 Kg. El año pasado pesqué muy bien toda la temporada. Fue muy buena la pesca en general para marrones en el río, en el lago, y la mejor pesca que tuve fue de 9 am a 3 pm. Un horario que para una marrón no es tan bueno, pero fueron impresionantes las marrones que metí, se van rompiendo un poco las reglas.
Fd: ¿Cómo estuvo la pesca del lago este año?
RA: Estuvo bastante floja. Hubo muchas variaciones de niveles de agua. Estaba bajo el lago, después en diciembre llovió mucho, creció muchísimo, y además hizo mucho calor. Después de una erupción volcánica tenés un tope muy bueno, y después va a bajar y quizás el año siguiente va a volver a subir.
El ambiente sufrió. No es que cayó la ceniza y se fue. Hay lugares donde hay mucha acumulación de cenizas en el fondo. Cambia el PH del agua. Todavía no sabemos qué es lo que realmente va a afectar el volcán, es todo un proceso que hay que ir llevando. El año pasado fue un excelente año para la pesca. Se da en todas las erupciones volcánicas que hubo anteriormente, está escrito; fueron los mejores años de pesca. El año pasado se dio en el Limay, se dio en esta zona por la erupción.
Este verano fue malo para la pesca, a lo mejor el siguiente levanta. Uno no puede saber por qué realmente; pero por ejemplo, sube el nivel del río un metro y se te llenó el río de pescados.
Fd: Estuviste pescando en Chile, ¿qué te pareció el Petrohué?
RA: Muy pescable pero con mucho palo. Grande como el Limay. Tienen todo: salmón chinook, trucha arco iris, encima tamaño monstruoso.
Yo empecé a pescar pez sierra con mosca. Terrible. Desde Osorno, 80 kilómetros al mar. Embarcado. Tira y se va debajo del bote, saca muchísima línea. Está bueno porque es diferente. Es muy loca la pesca.
Fuimos 5 kilómetros de mar para adentro y tiramos a donde estaban los cormoranes y pingüinos. Estaban los peces sierra comiéndose las sardinas y los cormoranes y pingüinos comiendo las sobras. Y los cormoranes hacen un redondel y vos tiras al medio. Dejas hundir, hundir y como que entraría al medio del cardumen de las sardinas. Cuando ya hundió, el botero da marcha de motor y vos afirmas la caña. Afirmas y donde se movió un poquito la línea es como que sale del cardumen de sardinas. No sabes lo que son los piques, tremendos pero es como la barracuda igual pero largos. Metimos como 30.
Fd: ¿Y los salmones?
RA: Impresionante. Me quedaban 30 metros de backing, y 200 metros le había cargado. Me cortaron todo. Me fui a la camioneta porque tenía que arrancar de nuevo.
En el Petrohué, diferente al Puelo, el salmón está más orillero. Todos los días los veo. Suben el río. Te parás en la corredera y ves los lomos que pasan. Están todo el tiempo rolando. Ves un cardumen enorme y no toman. Vos les pasas la mosca en la cara y no te toman.
En el puente, miras el run y a quienes están pescando y ningún pescado le va a la mosca. Viene otro y hace lo mismo y ningún pescado le va. De repente, activó uno y activan todos. Y el que viene pescando clava uno, y el que viene atrás otro. Y después se planchan. Y más tarde, se activan de nuevo a las 3 ó 4 horas.
Fd: ¿Qué nos podes contar del proyecto Big Fish Patagonia? ¿Cómo surgió la idea y de qué se trata?
RA: Después de guiar por años en Santa Cruz y haber visto peleas increíbles de Steelheads del Atlántico pensé en filmar y editar un video para poder compartirlo con el público. Más tarde, nos dimos cuenta de que el proyecto podía expandirse mucho más y por eso elegimos cinco ríos que nos interesaban de una manera particular. Esos son el Irigoyen, el Grande, el Gallegos, el Santa Cruz y el Limay medio y superior. Todos de truchas anádromas, salvo el Limay.
Fd: ¿Con qué objetivos en mente llevan a cabo la realización del film Big Fish Patagonia?RA: Queremos demostrar que existe en la pesca un estilo diferente y también colaborar con la conservación de los peces. Que además de que existe esta pesca extrema, de acción y de pescados grandes, hay que recordar al público el potencial que tienen nuestras aguas. Recalcamos, sobre todo, que el pez grande es el que debe volver al agua, este que es el mayor reproductor y no los más chicos, como a veces se cree.
Fd: Muchas gracias Pelado.