Armamos el BIM a la mañana siguiente de llegar al Moquehue, sobre la orilla de la villa y salimos 1/2 tarde, fuimos a la orilla donde aún daba la sombra, osea LDC profunda con grandes piedras, como siempre me gusta, arranco remando yo (de paso estudio el panorama mejor) y también me ralajo un poco. Casi 11 am empiezo a castear yo cambiando la técnica de Ariel, él buscaba de flote probando con tooooodas sus moscas, pegadito a la orilla con excelentes cast y nada de nada, pongo teeny 130 en la Winston 4, leader de fluocarbono 4x de 9pies y una wolly buger verde oliva atada por Mario (Capovia) para el Limay (osea grande).
Dos o tres tiros y dejo profundizar como 4 metros y de repente vemos que la línea se dobla de manera extraña, había tomado en caída libre, cuando quise reaccionar TAC me soltó, ahhhh imaginate la bronca, por cancherear, horas sin nada y cuando hay un pique se me va. (burroooooo). Sigo con la misma técnica y 10 minutos después al pasar por un mini arroyito decidimos parar a 50 metros para  tomar unos mates y castear desde unos piedrones. Cuando nos arrimamos veo como era el fondo, un paredón hondisimo que se metía para adentro de la montaña tipo pansa de embarazada. Ariel baja del bote, sin mirar atrás, trastabilla en el agua, hace dos tiros, yo me quedo sentado en el pontón mirando esa LDC, me empujo 2 metros de la costa y hago un cast sencillo paralelo, debajo de donde tiraba Ariel, dejo profundizar los 9 metros de la teeny y pego 2 tirones secos con la caña, un golpe tipo surubí casi me saca la caña y seguido de una arrastrada a una velocidad increible, no paraba nunca, todo en forma vertical, me sacó toda la línea y backing no se cuanto en segundos, ya me había parado y apenas ponía la mano debajo del reel, te juro me quemó la mano, la caña a full, todo al límite. Hasta que veo que el backing empieza a formar una curva hacia el medio del lago, recién ahí respiré, la línea se perdía en el fondo totalmente turquesa e imposible de descifrar la profundidad, calculo que a los 70 metros empezó a levantar, recién ahí pude empezar a recoger y empezó a llevarme de paseo, esto duró segundos y Ariel no pudo subirse al bote, quedó en la orilla filmando como me llevaba a navegar, a unos 100 mts de la orilla empezó a subir, siempre backing, sol a pleno y lago planchado, cuando la vi, era un tronco increíble, ahí me agarró el cagaso de mi vida, tenía que verla de cerca, la caña NUNCA dejó de estar a full, no podía arrimarla, yo iba parado tipo esquí acuático llevando el bote derecho para ganarle metros, así 12 minutos hasta que empezó a dar vueltas y pude sacarle algunas fotos intenté filmarla pero no veía la pantalla del teléfono, siempre nadaba a 2 metros de prof, cuando la subía arrancaba para abajo a fondo y oooootra vez todo de vuelta, la última parte fue una lucha de cómo sacarla de abajo del bote, una vuelta alrededor y boooom abajo del bote, así estuvimos otros 8 minutos +o- hasta que en una de esas le emboqué su cabezota en el copo, menos mal que es 1/2 grande y pude levantarla.
Nunca en mi vida remé tan rápido para la orilla, parado y en estilo molinete a foooondo llegué a la orilla, Ariel ya estaba aburrido esperando, el apuro por bajarla al agua era lo más importante. No hicimos muchas fotos, el veril daba justo en la línea del sol, y teníamos miedo de su recuperación, la inexperiencia en estos casos con un animal de este calibre hizo que la soltemos en cuanto vimos que estaba bien, podríamos haber sacado más fotos, pero los nervios por su supervivencia eran muchos. Se fue nadando pero nunca se irá de mi mente.
En un lago donde pasaban trolling y trolling sin respiro, ese macho la tenía clarísima ojalá viva muchos años más y muera de viejo.
Este era un viaje al cual lo mencionaba como "NO de PESCA" y la naturaleza me regaló esa marrón que difícilmente iguale algún día.
Que bueno que estuvo Ariel para compartirla, gracias locón.